San Jacobo de ternera

San Jacobos de ternera

Los San Jacobos son un clásico, el típico, librito de lomo de cerdo con jamón y queso, en este caso cambiamos el cerdo por la ternera. La verdad es que, citando fuentes, el otro día en la carnicería había una señora que dijo: «me cortas lomo de ternera como si fuera para San Jacobos», y yo, claro, «culo veo, culo quiero» y de paso le he dado una alegría a la peque para cenar.

La ventaja frente al lomo de cerdo es que no necesita hacerse tanto y puede salir más jugoso.

Ingredientes para San Jacobos de ternera

  • 8 libritos de lomo de ternera
  • 8 lonchas de jamón cocido (4 si son grandes)
  • 8 lonchas de queso fundido
  • 2 huevos
  • Pan rallado
  • Aceite, sal, perejil y 2 dientes de ajo.

Cómo hacer San Jacobos de ternera

1. En primer lugar poner en maceración los libritos de lomo de ternera durante 24 horas con aceite de oliva, perejil y ajo , esto hará que tome un sabor característico. Este paso se puede obviar pero la receta es la receta.

Poner en maceración la ternera

Poner en maceración la ternera

2. Abrimos los libritos y rellenamos con una loncha de jamón cocido y el queso.

Rellenamos con jamón y queso

Rellenamos con jamón y queso

3. Batimos los dos huevos y añadimos sal. Pasamos los libritos ya rellenos por pan rallado, huevo y pan rallado, vamos, que los empanamos.

Empanamos los libritos

Empanamos los libritos

4. En una sartén ponemos aceite y a fuego fuerte freímos, con cuidado de que no se nos queme.

Freír los libritos

Freír los libritos

5. Como siempre que freímos, ponemos sobre papel absorbente para quitar el exceso de aceite.

Notas:

Podemos cambiar el jamón cocido por jamón serrano y el queso fundido por queso de roquefort, un queso curado,…

Dorada al horno con tocineta

Dorada al horno rellena de tocineta

La dorada o «Sparus aurata» es un pescado (o pez cuando está a sus anchas) muy habitual en la gastronomía española, especialmente desde que se cría en cautividad. como curiosidad comentaros que es una especie hermafrodita protándrica; es decir, son machos al nacer hasta que alcanzan aproximadamente los dos años, entonces empiezan a dudar,  y a partir de los tres años se convierten en hembras maduras. Algunos individuos actúan como machos toda su vida. Aparte de la edad influye el tamaño, aunque ambos normalmente van ligados. A partir de los 600 g suele cambiar el sexo de los machos hacia hembras, así que si os coméis una dorada grande os estaréis comiendo un «dorado» realmente.

Bueno a lo que íbamos, vamos a cocinar unas doradas de ración.  Si por contra son más bien grandes, podéis poner media dorada por persona, bien cortada longitudinalmente o transversalmente, si la cortáis de manera transversal, a uno le tocará cabeza y a otro cola, así que mejor longitudinal y café para todos.

Le he pedido a la pescatera que me quitase la espina y la cabeza, pero aún con todo lleva espinas para aburrir, así que para los críos mal.

La rellenaremos y adornaremos con tocineta cortada fina, acompañaremos con patatas y cebolla y al regaremos con un verdejo de rueda. La dorada de acuicultura es sosa, así que de esta manera le daremos un poco de vidilla.

Ingredientes para Dorada al horno rellena de tocineta

  • 4 doradas de ración (300 gr/ud), 2 si son más grandes
  • 3 patatas
  • 3 cebollas
  • 3 dientes de ajo
  • 16 lonchas de tocineta doble finas
  • 12 espárragos trigueros
  • 1 vaso de vino blanco verdejo
  • Aceite y sal

Cómo hacer Dorada al horno rellena de tocineta

1. En primer lugar vamos a preparar la cama de patatas y cebolla. Para ello cortaremos las patatas panadera, la cebolla en juliana y los dientes de ajo cortados en tres trozos cada uno. Incorporaremos sal y freiremos en la sartén durante unos 10 minutos aproximadamente, por dos razones, para que cojan color y para que se acaben de hacer con la dorada en el horno ya que el pescado se hace antes y no queremos ni que el pescado nos quede seco ni las patatas crudas.

Preparamos la cama de patatas y cebolla

2. Echamos pimienta a la dorada, sal no, que la tocineta es de por si salada. Abrimos y el interior lo rellenamos con tres filetes de tocineta. El cuarto filete de tocineta lo cortaremos en tres tiras para adornar la dorada.

Rellenamos la dorada limpia y sin cabeza con tocineta

3. En una fuente de horno colocaremos las patatas y la cebolla, sobre ella las doradas y rociaremos con un vaso de vino verdejo mezclado con agua.

Colocamos en la bandeja de horno

4. Precalentamos en horno a 220 º C y horneamos durante 30-40 minutos a 150 º C (dependiendo del tamaño de las doradas) en la mitad del horno y calor por arriba y por abajo. En el último momento podemos poner el gratinador a tope durante 2-3 minutos para que se tueste la piel de la dorada y la tocineta se ponga crujiente (si no lo ha hecho todavía).

5. Acompañamos de los espárragos trigueros que saltearemos en la sartén con aceite y sal.

Espárragos verdes salteados

 

Notas, bola extra, consejillos,...

Ojito con las espinas que tiene para parar un tren.

Podemos sustituir la tocineta por jamón serrano.

Arroz a la calabresa

Arroz a la calabresa (o arroz del de moño rojo)

Bueno, volvemos con un plato rápido sencillo y resultón. Podríamos llamarlo también arroz con chorizo (más de aquí) pero parece que «a la calabresa» le hace tener más glamour. La verdad es que las últimas pizzas que he pedido «a la calabresa» han resultado ser «de chorizo», ya que la longaniza calabresa no es más que un chorizo que además de carne de cerdo tiene carne de ternera (en algunas recetas).

Podría haberlo hecho siguiendo la misma técnica que en otros arroces que hemos hecho anteriormente, esto es, sofrito, arroz, caldo y a cocer, pero como tuve que hacer arroz blanco para otros menesteres, decidí animarlo un poco con un chorizo que se había quedado huérfano por el congelador.

Para los que les guste el picante que sigan la receta al pie de la letra, a los que no les vaya tanto, sustituyan la palabra «picante» por «dulce» y eliminen las cayenas.

Dedicado para mi amigo José María en recuerdo de las medias calabresas que nos hemos comido.

Ingredientes para Arroz a la calabresa (o arroz del de moño rojo)

  • 200 gr de arroz
  • 2 chorizos picantes (de ristra) o longaniza calabresa
  • 1 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cayena
  • agua, sal y aceite

Cómo hacer Arroz a la calabresa (o arroz del de moño rojo)

1. Ponemos a cocer el arroz en abundante agua con sal (la sal no la pongáis abundante). Un vez rompa el agua a hervir, echamos el arroz, dejamos cocer 10 minutos. A los 10 minutos cortamos la cocción con agua fría y escurrimos el arroz.

Arroz cocido

2. El sofrito. Picamos la cebolla y los ajos y ponemos a pochar en la sartén con un poco de sal, a fuego no muy fuerte. Una vez tengamos pochada la cebolla incorporamos el chorizo troceado y la cayena, sofreímos.

Pochar la cebolla y el ajo

Añadir el chorizo y la cayena

3. Cuando tengamos el chorizo ya cocinado, añadimos el arroz, que mezclaremos con el sofrito, veremos que ya tomando el color rojo del chorizo.

Añadir el arroz al sofrito

4. Cubrimos con agua y dejamos a fuego fuerte para terminar de cocer el arroz.

Cubrir con agua y terminar de cocer

Notas, bola extra, consejillos,...

Si no nos gustan las emociones fuertes, cambiaremos el chorizo picante por chorizo dulce y eliminaremos la cayena.

Perfectamente podríamos ejecutarlo como cualquier otro arroz, pero había que aprovechar el arroz blanco.

Es tiempo de comenzar

Queridas amigas, queridos amigos y queridas familias

Como diría el gran gurú de la cocina casera Karlos Arguiñano, «queridas amigas, queridos amigos y queridas familias…», tras un tiempo sabático de blog, vuelvo a escribir sobre cocina, he ido contestando a los comentarios (que no han sido muchos), pero de escribir lo que se dice escribir, nada de nada. Si Ferrá Adriá cierra el garito y no pasa nada, pues no íbamos a ser menos, todo el mundo tiene derecho a tomarse un tiempo de reflexión.

La verdad es que es llegó un momento que no tenía tiempo, así que puse El Abrelatas con el piloto automático, de allí el suflé en la página principal durante este último año.

Se quedaron unas cuantas recetas en el disco duro, que voy a ir publicando (si me acuerdo de las medidas y demás) y tengo algo preparado por allí, bueno, que nos seguimos viendo entre estos fogones donde nada se quema y todo sabe bueno, bueno.

El espíritu inicial del blog no era poner sólo recetas, que de eso hay mucho, así que en ello estamos.

A comer, a beber y a disfrutar con moderación, que me os habéis quedado en los huesecicos estos últimos meses.